Actualmente, muchos trabajos implican pasarse sentado muchas horas a lo largo del día. Por eso es esencial escoger un buen mobiliario de oficina y una silla que sea adecuada y ergonómica, una silla que se adapte a los movimientos del cuerpo del usuario.

Sedus explica que la naturaleza del ser humano está basada en el movimiento, a pesar de que hoy en día las condiciones de vida actuales nos llevan a adoptar un estilo de vida más sedentario ya pasar muchas horas sentados en una posición rígida. Pero el cuerpo necesita moverse constantemente y en libertad. Así, se consigue no sólo evitar una mala postura y la tensión y carga de los discos intervertebrales y de los músculos, sino que, además, la dinámica corporal también hace posible la movilidad intelectual y el bienestar emocional. Todo esto se traduce en personas más productivas, con una capacidad de concentración y de trabajo superior y con mayor motivación.

Sin embargo, dado que cada cuerpo es diferente, no existe una silla universalmente adecuada, pero sí que hay ciertos criterios a tener en cuenta a la hora de escogerla. En este sentido, Sedus explica la técnica aplicada en sus sillas para conseguir un mejor asiento.

De entrada, partiendo de las diferencias de cada cuerpo, es necesario poder ajustar fácilmente todas las partes de la silla. De hecho, ésta es la apuesta que hace Sedus, una técnica basada en el ajuste personalizado de cada silla.

El respaldo de la silla debe contribuir a mantener una postura derecha de la espalda. La presión de apoyo debe ser regulable para ajustarse al peso, estatura y preferencias de cada usuario. Las sillas de Sedus también cuentan con un buen apoyo en la parte lumbar que se ajusta a la altura y apoya a los discos intervertebrales del arco vertebral lumbar. En algunos casos, también es necesario un reposacabezas para prevenir las tensiones musculares y descargar la musculatura de la nuca.

El asiento debe ser suficientemente ancho como para que el usuario pueda sentarse en la parte central y le sobre espacio por los lados. La profundidad debe ser también adecuada para que no toque detrás de las rodillas del usuario y tenga un borde redondeado, para evitar problemas de opresión y circulación. Sedus también apuesta por asientos desplazables hacia delante o hacia atrás, que permiten ajustar la inclinación y que aseguran un buen apoyo.

Los apoyabrazos son también una parte importante en tanto que permiten mantener los brazos en una posición de 90º. Es importante que cuenten con una buena fijación y sean fácilmente adaptables a la altura para evitar que los hombros tengan que presionar. En este sentido, las sillas de Sedus permiten adaptar los apoyabrazos no sólo a la altura, sino también a la profundidad y anchura.

Elegir una silla giratoria permite mayor libertad de movimiento lateral y, por tanto, puede evitar mal gestos al girar el cuerpo de forma inadecuada. Generalmente, lo mejor es elegir una silla con cinco ruedas ya que proporciona mayor estabilidad y evita tener que hacer fuerza con los pies para mantenerse en una posición fija.

Por último, también hay que tener en cuenta el tapizado. Aunque pueda parecer un aspecto más bien estético, es importante tener en cuenta que un tejido transpirable y resistente suele ser el más adecuado.

Así, escoger el mobiliario de oficina y una silla para la oficina va mucho más allá de buscar la comodidad y la estética. Una buena elección es una apuesta por la ergonomía, lo que se traduce en más motivación, capacidad de concentración y, por tanto, más productividad en la empresa.