La pandemia del coronavirus ha modificado los hábitos de los estudiantes de los centros educativos de Cataluña y esto se ha trasladado a las nuevas necesidades de los alumnos en el aula.
Pandemia COVID-19: digitalización forzada
El 12 de marzo de 2020 es un día que ha quedado señalado en la mente de profesores y alumnos. En Cataluña se tomaba una medida inédita hasta el momento. Escuelas e institutos cerraban sus puertas y las universidades suspendían las clases por el coronavirus. Una medida tomada por el gobierno catalán que dejaba en casa a 1.600.000 alumnos y casi 80.000 docentes de guarderías, escuelas e institutos. En total, más de 5.400 centros. En las universidades afectó a unos 200.000 estudiantes ya unos 20.000 profesores.
Las escuelas se apresuraron a pensar la forma de continuar con parte de las clases, a distancia, buscando soluciones como las reuniones vía Google Meet, zoom u otras plataformas, o compartiendo materiales con los alumnos a través del correo electrónico.
Durante la pandemia los estudiantes tuvieron que acostumbrarse a la interacción online.
Durante el curso 2021-2022 la digitalización ha continuado, con especial énfasis en los alumnos universitarios. Poco a poco, pero la presencialidad se va recuperando y es hora de volver a las aulas.
El campus omnicanal
Los alumnos han cambiado y sus hábitos en el entorno educativo también. El campus es ahora omnicanal. ¿Qué significa esto? Que se mueve entre el entorno online y el offline.
La experiencia y los servicios se han digitalizado y la presencialidad y la virtualidad conviven con normalidad.
Este cambio provoca que haya llegado el momento de reimaginar el entorno educativo.
Smartlearning: Reimaginando el entorno educativo
El smartlearning es una idea que nace durante los primeros años de la década de 2010 de la mano de varios autores como Hwang (2014) y Scott & Benlamri (2010), que le definen como un aprendizaje omnipresente apoyado por el uso de la tecnología.
El proceso del smartlearning se divide en 3 partes: PENSAR, HACER y COMPARTIR.
El fabricante de mobiliario Activo, ha hecho una propuesta para equipar los espacios de las aulas, escuelas y universidades pensando en estas 3 partes:
PENSAR: ganar conocimiento
Espacios pensados para investigar, investigar, practicar las técnicas de brainstorming, analizar y trabajar el “design thinking”.
HACER: hacer las ideas tangibles
Realizar las ideas tangibles ayuda al aprendizaje. Los Hub Labs, las habitaciones de proyectos, los Innovation Labs, espacios para la fabricación de prototipos o los Tech Labs son algunos ejemplos.
COMPARTIR: compartir información y recoger feedback
Más allá del pensar y el hacer, el compartir es poner en común los resultados obtenidos. ¿Con quién? Con otros alumnos o con la comunidad educativa. Se puede realizar en espacios como Learn Labs, áreas abiertas, cafés, espacios, lounge…
La educación ha cambiado y seguirá cambiando. En Maieroffice te ofrecemos soluciones reales para aplicar cambios en la forma de educar en tu centro.